Los 100m lisos
Rabia, desorientación,
bipolaridad, sarcasmo, lágrimas, hormonas y
decepción al recibir una foto que bien podría ser ésta:
–excepto
porque la tía que aparecía tiene 50 kg y 50 años mas, parece de “cogslada” y
tiene una nariz como una sandía (con objetividad y sin acritud ninguna…eh!;
ja-ja) –
¿La
razón?: Que no me atraen las chicas y, que me la manda mi “ex” con pie de foto: “he
conocido a alguien”.
¡No!, no has conocido a
alguien… ¡te la has llevado a un hotel, cerdo!
Y es
que, por mucho que creamos que un novio es agua pasada, estemos empezando algo
nuevo o, prefieras comer escorpiones a volver con él; tu mundo se viene abajo
al verle con otra, y esa “otra”, que probablemente nos parecería simpática si
te la presentasen en cualquier otra situación, siempre será “la zorra que está
con él”.
Esto es así… y los pimientos son “asaos”.
Y en
ese momento, de repente, todos los defectos de ese insecto con
el que te dabas besos hace unos meses, se esfuman. Sólo eres capaz de recordar
lo bueno y encima te auto-convences que eras feliz con él. A esto India lo denomina
AUTOSABOTAJE… – me encanta la definición–
Por
eso yo suelo escribir una lista con los motivos por los que rompes con un tío
para poder leerla en estos casos. (Altamente recomendable para ganarle la
batalla a tu “yo enemigo”)
Muchos
hombres, en cuanto acaban una relación,
escuchan el pistoletazo de salida para iniciar la carrera de los 100 metros
lisos por quién consigue antes “ser feliz”, para terminar siendo una
competición por quién encuentra ligue antes. La experiencia me dice, que no
sólo es necesario un tiempo de “luto”,
sino una intención clara de no salir a buscar a “esa” persona para que
aparezca. LEY DE MURPHY.
Las
mujeres, quizás también nos apuntemos a esa carrera, pero tenemos más clase…
somos mas inteligentes y sabemos como hacer que se enteren sin necesidad de ser
tan directas.
Y
así hombres y mujeres, capullos y ligeras de cascos, se pirran por aparecer as soon as possible en las fiestas y en
esa discoteca de moda, con sus ligues, e interpretan verdaderas obras teatrales
delante de sus “ex” para demostrar que son más felices con los nuevos
“consortes”. Besos lascivos, risas exageradas a lo Loreto Valverde y ante todo,
simpatía máxima e hipocresía con el contrario, del palo de:
“A ver cuando quedamos a cenar los cuatro”, “Ahora que hemos rehecho nuestras vidas quizás podamos ser amigos”
…que terminan siendo puyas tales como:
“¿Ya te lo has llevado a la cama?”; ó “A tu padre le gustará para ti mas de lo que le gustaba yo…”
“A ver cuando quedamos a cenar los cuatro”, “Ahora que hemos rehecho nuestras vidas quizás podamos ser amigos”
…que terminan siendo puyas tales como:
“¿Ya te lo has llevado a la cama?”; ó “A tu padre le gustará para ti mas de lo que le gustaba yo…”
¡Qué pérdida de tiempo absurda!
No
hay nada más inquietante que el no saber nada de la vida de tu ex, porque la
imaginación es mucho mas poderosa y más perra. Yo, por mi parte, cremallera y
post-it en mi pc escrito: “MAKE
IT COUNT”.
Olivia
No hay comentarios:
Publicar un comentario